La literatura femenina tiene su propio universo y, más allá de la discriminación que suelen sufrir las mujeres en diversos ámbitos de la vida, han sido muchas las escritoras que lograron imponerse en la consideración universal. Por eso, este proyecto pretende visibilizar y acercar la literatura hecha por mujeres a un público interesado tanto por la propia literatura o el diseño editorial.
Se trata de una recopilación de 8 escritoras de finales del siglo XIX que se vieron obligadas a cambiarse la identidad por la masculina. Por tal de poder publicar sus obras las firmaron con un pseudónimo masculino y a partir de entonces fueron conocidas por este.